El Agua Residual Tratada producida por CMA se logra a través de un proceso biológico aplicado a Aguas Residuales “caracterizadas” y de proveniencia preferentemente “doméstica”, con alto contenido de materia orgánica.

Lo anterior favorece el procesamiento biológico, retirando de las Aguas Residuales los sólidos suspendidos y un alto contenido de materia orgánica para darle una apariencia de limpieza y transparencia, complementada con un proceso de desinfección a base de cloro, lo que permite en forma segura

y confiable su manipulación.

El proceso de CMA, totalmente biológico, no actúa ni modifica las características químicas del agua que recibe para procesamiento, por lo tanto los sólidos disueltos, la dureza, el contenido de sílice, la conductividad y otros permanecen en el agua procesada y únicamente son monitoreadas a través de análisis periódicos para registrar sus valores, su variación temporal y como información al usuario.